Una adicción se puede decir que es la necesidad del cuerpo de recibir un estimulante que se ha convertido en indispensable para él, muchas sustancias producen hábitos de consumo y la persona que las usa se considera adicto.
Las adicciones son o pueden Ilegar a ser enfermedades mentales, porque Ia ansiedad del adicto por consumir una droga o realizar actividades placenteras es incontrolable y, con el tiempo, lo conduce al desequilibrio mental.
Hay múltiples tipos de adicciones; las tres más extendidas y, por tanto, las de mayores consecuencias en México son:
  • El tabaquismo
  • El alcoholismo
  • La drogadicción
La primera vez que se toma alcohol o se fuma un cigarro puede ser por mera curiosidad o para evadir de un problema , pero posteriormente puede convertirse en una necesidad para el cuerpo, por lo que se constituye en una adicción.
 
Tabaquismo
Se ha comprobado estadísticamente que dos de cada cinco personas que fuman 20 o más cigarrillos al día, mueren prematuramente antes de los 65 años; esto representa el doble de Ia proporción de los no fumadores.
A pesar de que existe gran cantidad de pruebas médicas que apoyan esta estadística, Ia mayoría de los fumadores continúa con ese vicio.
Casi todos iniciaron ese mal hábito en Ia adolescencia, por pensar que el fumar da personalidad o simplemente porque todos lo hacían y no se percataban de los peligros a los que se exponían.
Erróneamente, los cigarrillos se han convertido en un símbolo de madurez o en un apoyo para controlar Ia timidez o Ia torpeza en diversas situaciones sociales.
Los efectos del tabaco en el organismo dependen de varios factores:
a) Si se fuma pipa, puros o cigarrillos.
b) La cantidad de humo que se envía a los pulmones.
c) El tiempo que se lleva fumando.
El humo del tabaco contiene muchas sustancias químicas nocivas; pero tres de ellas son muy peligrosas para Ia salud: el alquitrán, Ia nicotina y el monóxido de carbono.
El alquitrán es una mezcla de varias sustancias que se condensa en los pulmones en forma de una masa pegajosa parecida al jarabe.
La nicotina es un alcaloide, en estado puro es venenosa y difícil de eliminar, aun con los mejores filtros de cigarrillos. La nicotina se absorbe en los pulmones y actúa sobre el sistema nervioso.
El monóxido de carbono disminuye Ia capacidad de transporte del oxígeno por los glóbulos rojos.
Está comprobado que el humo del tabaco (en especial su alquitrán) es carcinogénico, o sea, capaz de producir cáncer en los tejidos con los que entra en contacto.
Se ha demostrado que respirar el aire contaminado con el humo del tabaco incrementa el riesgo de cáncer de pulmón en los no fumadores o fumadores pasivos, como se les ha denominado para mayor precisión.
Por si esto fuera poco, se sabe que Ia mayor parte de las enfermedades respiratorias y cardiovasculares se presenta con más frecuencia en las personas que tienen el hábito de fumar.
 
Alcoholismo
El alcoholismo es una enfermedad crónica, un desorden de Ia conducta caracterizado por Ia ingestión repetida de bebidas alcohólicas. Esta droga representa el mayor problema de dependencia, pues el número de adictos es muy elevado; esto se debe a que socialmente se acepta como normal que los adultos consuman bebidas alcohólicas en cualquier tipo de reuniones. Por otra parte, el cine y Ia televisión contribuyen a incrementar esta adicción.
La ingestión moderada de cerveza, vino o licor no es dañina para Ia salud, pero puede evolucionar sin que el afectado se dé cuenta, al consumo excesivo y perjudicial.
El principal efecto del alcohol, y Ia razón más importante de que casi todas las personas lo beban con moderación, es que atenúa las reacciones del cerebro y los nervios.
En pequeñas dosis, el alcohol surte un efecto tranquilizante, pero al ir aumentando Ia cantidad, se presenta a veces Ia sensación de pérdida de las inhibiciones; en consecuencia, los bebedores se sienten despiertos y ocurrentes.
Sin embargo, si Ia cantidad que se toma es excesiva, se producen, entre otras reacciones, inhibición de Ia memoria, Ia concentración, el juicio, falta de coordinación, etcétera.
De todo lo anterior, se puede deducir que los efectos del alcohol se presentan principalmente en el sistema nervioso y el cerebro.
El alcohol es también un vasodilatador (ensancha los vasos sanguíneos); por eso Ia gente que lo ingiere parece sonrojada, pero al mismo tiempo Ia vasodilatación permite la pérdida excesiva de calor de los tejidos corporales, lo que produce hipotermia (enfriamiento).
El corazón también se ve afectado porque, a causa del alcohol, se lesiona su tejido muscular.
El hígado es otro de los órganos más afectados, porque las grandes y prolongadas ingestiones de alcohol producen cirrosis hepática. El hígado cirrótico no cumple correctamente sus funciones, lo cual incluso puede provocar Ia muerte del alcohólico.
Hay muchas otras enfermedades que son causadas por Ia ingestión de alcohol (hipoglucemia y mala nutrición, por ejemplo), sin mencionar que el alcoholismo provoca dificultades en el trabajo, en Ia familia e, incluso, con Ia ley.
Aproximadamente una tercera parte de los accidentes de tránsito, a menudo mortales, son producto del consumo no moderado de alcohol. En los países industrializados, alrededor de una persona de cada 100 es alcohólica.
La enfermedad es cinco veces más común en los hombres que en las mujeres, y los hijos de padres alcohólicos parecen más propensos a desarrollarla posteriormente.
Existen dependencias oficiales y particulares que proporcionan atención gratuita a quienes padecen esta enfermedad.
Drogadicción
Se define como droga cualquier sustancia química no nutritiva que puede absorber el organismo.
Comúnmente, droga es Ia medicina o sustancia que se toma para obtener un efecto mental temporal casi siempre placentero. Por ejemplo, Ia morfina puede recetarse médicamente para aliviar el dolor, pero al ser administrada a personas sanas, su efecto es una sensación transitoria de bienestar. Las drogas tienden a producir una fuerte y perjudicial adicción.
Los jóvenes son, en general, los más afectados por Ia drogadicción y empiezan a consumir drogas debido a una o varias de las siguientes causas: falsa amistad, falta de verdaderos ideales, curiosidad y búsqueda de nuevas emociones.
Entre las drogas más conocidas y utilizadas se encuentran las que se mencionan a continuación.
Opiáceos
Incluyen el opio, Ia morfina y Ia heroína; alivian el dolor físico y Ia tensión mental produciendo euforia temporal. Una persona que consume estas sustancias presenta pérdida de peso, letargo, variaciones de humor, sudor, habla farfullante, ojos irritados y palidez.
A largo plazo, el consumo de los opiáceos produce pérdida de apetito y, en consecuencia, desnutrición, náuseas y vómitos dolorosos, debido a Ia carencia de droga; extraordinaria susceptibilidad a las infecciones y, por lo común, muerte a causa de sobredosis, pues son drogas que producen una fuerte adicción.
Cocaína
La cocaína, a Ia que a menudo se le denomina "nieve", estimula el sistema nervioso produciendo alucinaciones.
Una persona que consume cocaína presenta pupilas dilatadas, temblor, intoxicación evidente, alucinaciones e insomnio. A largo plazo, Ia cocaína produce ulceraciones en las fosas nasales si se aspira.
El cocainómano se cree capaz de realizar las más difíciles empresas; esta sensación crea lentamente una situación de dependencia de Ia cual es muy difícil recuperarse, incluso con un buen tratamiento.
Mariguana
La mariguana es una droga que relaja Ia mente y el cuerpo. En quienes la consumen se observan ojos enrojecidos, pupilas dilatadas, falta de coordinación física, y a veces, fuertes náuseas.
A largo plazo puede provocar daños psicológicos irreversibles.
Drogas psicodélicas
Algunas de éstas son el ácido lisérgico (LSD) y Ia mescalina. Al consumirse suelen presentarse alucinaciones, a veces placenteras, a veces terroríficas. Una sola dosis puede producir alteraciones psicológicas duraderas.
Sustancias volátiles
Aquí se incluyen los vapores inhalantes de sustancias, como ciertos pegamentos y líquidos limpiadores, thiner, etcétera.
Estas sustancias causan alucinaciones, mareos, euforia temporal y, en ocasiones, inconsciencia.
A largo plazo existe el riesgo de lesiones irreversibles del cerebro, hígado y riñón; también puede presentarse asfixia por inhalación.
Productos y sustancias como el tabaco, el alcohol y las drogas son perjudiciales. Su consumo inmoderado o adicción destruye el cuerpo, Ia mente y el autocontrol del ser humano, y produce enfermedades como cáncer, cardiopatías, cirrosis y otros daños, que frecuentemente culminan con Ia muerte.
A esto hay que agregar Ia desesperación y angustia de los familiares de las personas que son víctimas de tales adicciones.